Armar un presupuesto, consiste en asignar el dinero a las áreas que son más importantes en tu vida.
Es una planificación semanal, mensual o del tiempo que más te convenga, que te permite organizar tus gastos por prioridad y detectar aquellas fugas de dinero.
Tener un presupuesto puede ayudarte en 2 puntos claves de tus finanzas personales:
- Aumentar tus ahorros (o empezarlos, incluso).
- Planificar el uso de tu dinero para salir de deudas.
Lo más importante es la constancia y encontrar el método que se acomode mejor a tus necesidades.
Paso 1: Haz una lista de tus ingresos
De acuerdo al periodo que hayas elegido (semanal, quincenal, mensual, anual, etc.), incluye todas tus entradas de dinero; quizá el más importante sea el salario, pero puede haber el dinero de una renta, comisiones, donaciones, ingresos por inversiones, etc.
Haz una lista de todos los ingresos reales, no cuentes con dinero que piensas poder obtener en algún momento, sino aquello que sabes con total certeza que va a llegar.
Paso 2: Determina tu ahorro
Si no tienes un sistema de ahorro o no eres constante, fija una meta al momento de elaborar tu presupuesto. Recuerda que ahorrar es un seguro ante imprevistos.
Se recomienda ahorrar el 20% de tus ingresos, sin embargo, puedes comenzar con el 10 o 5% según se ajuste a tus posibilidades. Toma en cuenta que ese porcentaje puedes incrementarlo más adelante. Lo más importante es comenzar a crear el hábito de ahorrar.
Ahorrar te permitirá, por ejemplo:
- Tener un fondo de emergencias.
- Realizar un viaje para vacaciones.
- Iniciar un negocio.
- Invertir en un Plan Personal para el Retiro.
- Alcanzar objetivos a mediano o largo plazo: un auto nuevo, una casa, educación de tus hijos, etc.
- Invertir en instrumentos que te generen ganancias.
No importa cuánto ganes, siempre puedes ahorrar algo.
Al finalizar tu presupuesto, podrás ver qué gastos podrían reducirse y destinarse al ahorro.
Paso 3: Asigna cantidades para tus gastos
Aquí comienza lo interesante. Es momento de asignar los montos de gasto a tu presupuesto. Puedes dividirlos en tres grandes rubros:
Ahorro: Primero, separa la cantidad que deseas ahorrar. Recuerda que es importante iniciar el hábito de ahorrar.
Gastos fijos: Todos aquellos que deben realizarse de forma frecuente como la despensa, renta, cuentas de luz y agua, teléfono, TV, colegiaturas, crédito de auto, gasolina, tarjetas de crédito, etc.
Gastos eventuales: Son gastos que deben cubrirse en periodos diferentes a lo básico, por ejemplo, trimestral, semestral o anual, como el predial, inscripciones escolares, renovación de seguros, placas, etc.
Puedes dividirlos entre el periodo para ahorrar una parte cada mes y que cuando llegue el momento de efectuarlos no se vuelvan un gasto pesado.
Aquí también pueden ir los gastos de entretenimiento, como los antojos, pedir comida a domicilio, ir al cine, concierto, etc.
Checa este ejemplo de un presupuesto sencillo:
¿Cuál es su saldo? $20,000 - 15,650 - 4,000 = $350
* Si tu saldo es positivo puedes agregarlo al ahorro o aportar a deudas.
* Si tu saldo es negativo, evalúa qué gastos puedes eliminar o reducir.
Paso 4: Usa alguna herramienta para administrar tu presupuesto
Manejar tu dinero de manera responsable es cuestión de constancia y disciplina. ¡Afortunadamente hay muchas herramientas para ayudarte! Te compartimos algunos ejemplos:
1. Lápiz y libreta
Con el tradicional lápiz y libreta es perfectamente posible llevar un registro diario. Destina alguna libreta especial y que puedas llevar contigo, especialmente mientras te acostumbras a registrar tus gastos.
2. Aplicaciones para tu teléfono
La tecnología es una grandiosa amiga que puede ayudarnos a llevar nuestros registros de gastos al día. Hay aplicaciones de registro manual, hay otras que se conectan a tu banco para que no se te pase nada.
Revisa tu tienda de aplicaciones, lee los comentarios de las que te interesen y ponlas a prueba, seguro encontrarás alguna que llene tus expectativas.
3. Plantillas de Excel
Esta práctica herramienta es muy útil si te tomas un poco de tiempo para personalizarla. La buena noticia es que tanto Microsoft como Google Sheets cuentan sencillas plantillas para control de presupuesto ya sea familiar, universitario, de negocio, etc.
